En este sentido, afirma, “la combinación de transporte carretero y ferroviario traería consigo una disminución de al menos 85 por ciento de las emisiones de GEI que genera el autotransporte en México”.
El ferrocarril ofrece, entre otras ventajas, la capacidad para recorrer grandes distancias y trasladar altos volúmenes de carga con un menor uso de combustible y de manera segura, lo que no sólo se traduce en una menor emisión de contaminantes sino en un ahorro considerable de recursos en varios aspectos, detalla.
De acuerdo con cifras de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF), en 2021 el transporte de carga por ferrocarril superó en 3.7 por ciento los niveles prepandemia (2019), al pasar de 125 a 129 millones de toneladas.
“Aunado a las ventajas en términos de sustentabilidad, el uso del transporte intermodal nos ha permitido hacer frente a otras problemáticas como es la falta de operadores y los efectos de la pandemia en la cadena de suministro, lo cual nos permitió elevar nuestro volumen de operaciones hasta 21% de 2021 a 2022, pese al COVID-19”, concluye la Directora de Multimodal Solutions Cargo.
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