México.- Campeche, un estado heredero de la cultural Maya, cuenta con 17 sitios arqueológicos entre los que destacan Calakmul, además de su hermosa ciudad amurallada, y tradiciones que han pasado de generación en generación y que esperan a los turistas, una vez que pase la pandemia del Covid-19.
Campeche, antigua capital de Yucatán
En el siglo XVI, Campeche contaba con un puerto comercial muy activo y fungía como entrada y salida de mercancía para Yucatán, provocando así, un ataque constante de piratas provenientes de Holanda e Inglaterra, por este motivo la ciudad fue amurallada para repeler las agresiones.
Años después y debido al comercio, se eleva la categoría de la ciudad a capital de Yucatán, el nombramiento se dio en el año 1826 y fue otorgado por Carlos III, Rey de España, pero el 29 de abril de 1863 el presidente Benito Juárez, concedió la federación a Campeche como un estado independiente.
Calakmul
Dos grandes estructuras se levantan al sureste de la selva tropical de Campeche, Calakmul, que significa “Dos Montículos Adyacentes” y es considerada la reserva tropical más grande de México y la segunda de América, solamente por debajo del Amazonas ubicada en Sudamérica.
La zona fue descubierta en 1931 por Cyrus Lundell, botánico americano que buscaba árboles de chicle y que terminó descubriendo la ciudad. Desde 1982 esta zona fue declarada como Patrimonio Cultura y Natural de la Humanidad. En la selva se cuenta con una gran riqueza nativa donde se encuentran jaguares, pumas, ocelotes, monos araña, osos hormigueros, águilas, tapires y más de 300 especies de aves.
Grutas de X´tacumbilxuna´an (Mujer escondida)
Ubicadas a 5 kilómetros de Bolonchén de Rejón, municipio de Hopelchén, las grutas cuentan con una extensión de 200 metros y bajando 350 metros más por una escalera iluminada, se pueden observar las impresionantes formaciones de cuevas y cavidades conoidales llamadas estalactitas (ubicadas en el techo) y estalagmitas (ubicadas en el suelo), así como cerca de 30 caprichosas figuras creadas por la constante circulación de agua.
Cuenta la leyenda local que la joven Lol-Be, hija de Timot, es separada de su amado Dzulin y escondida en las cuevas; finalmente es encontrada, pero dedido a una promesa que la chica hizo con su madre Lol-Ha al fallecer ésta decide volver a las cuevas y convertirse en piedra, tomando la forma de una mujer con un niño en brazos, ésta y varias leyendas son narradas por los locales, debido a las formaciones que se pueden disfrutar del lugar.
BTM
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