México.- La plataforma de servicios financieros Coru.com recomendó tener cuidado de ser aval de alguna persona, ya que corre el riesgo de ser boletinado e incluso embargado, sino se paga la deuda.
Un aval es una persona que asegura que será saldada la deuda de un tercero, lo que implica que, si la persona o empresa que contrajo la deuda no paga, la institución que dio el préstamo tiene el derecho de exigir al aval que la cubra o incluso ejecutar acción legal contra éste.
Coru subrayó que la ley ampara el pago de la deuda e incluso puede llegarse a un embargo en contra del aval, en caso de que éste carezca de recursos para enfrentar sus obligaciones se procede a retener sus bienes.
Una vez que la deuda ha sido liquidada, la persona que fungió como aval puede tomar acciones legales contra el deudor, sin embargo, implica un proceso legal adiciona sin garantía de recibir el pago correspondiente.
Otra consecuencia negativa en caso de impago por parte del deudor y el aval, dijo, es que ese atraso se reporta a para ambos ante el Buró de Crédito con una mala nota ante otras entidades financieras.
De acuerdo con la plataforma de servicios financieros, no todas las deudas requieren necesariamente un aval. Esta figura legal existe para títulos de crédito, lo que incluye a los pagarés y las letras de cambio.
En algunos casos se confunde con otras figuras legales diferentes, como la de fiador, que aplica a contratos de arrendamiento.
La institución prestamista define las condiciones bajo las que se desarrollará la función de aval; pero por lo general si se detecta insuficiencia económica o falta de patrimonio como garantía sobre el crédito, procede a solicitarlo.
Y si bien existen algunas alternativas para deslindarse de esta responsabilidad, no es un proceso sencillo.
El contrato que regula el préstamo establece las condiciones de la deuda. Si bien existe la posibilidad de renunciar a aparecer como aval, la institución que otorgó el préstamo o crédito es la única figura la encargada de autorizar este cambio.
Cuando alguien quiere dejar de ser aval, lo primero es revisar las condiciones establecidas en el contrato.
Para que el aval registrado sea removido de sus obligaciones debe conseguirse, en tal caso, un aval sustituto, aunque esto no es fácil, y primero debe informarse a la institución y a la persona que solicitó el crédito. Si todas las partes aceptan de buena fe, deberán buscar a quien cubra el rol.
Comentarios (1)
Sin comentarios