México.- La huelga que mantienen trabajadores de General Motors (GM) en Estados Unidos, provocó que la planta que tiene la armadora en Silao, Guanajuato, haya entrado en paro técnico, ante la falta de suministros.

La armadora informó en un comunicado que inició un paro técnico de producción en su complejo de manufactura ubicado en Silao, debido a la falta de componentes provenientes de plantas ubicadas en Estados Unidos que se encuentran en paro laboral.

“Mientras esta situación prevalezca, se aprovechará el tiempo para dar mantenimiento preventivo a las instalaciones y equipos”, informó la empresa.

General Motors agregó que sus plantas de manufactura ubicadas en Ramos Arizpe, Guanajuato; San Luis Potosí en la entidad del mismo nombre y Toluca, Estado de México, permanecen operando de manera regular.

El sindicato United Auto Workers (UAW), el más grande del sector automotriz en Estados Unidos, se mantiene en huelga desde hace dos semanas, ante la demanda de aumento salarial y mejores derechos laborales.

Esta huelga también prendió focos rojos en los municipios de Ramos Arizpe y Saltillo, Coahuila, ya que podría afectar a una de las principales planta proveedoras de esta armadora estadunidense.

Tanto los ayuntamientos como la Secretaría de Desarrollo Económico de Coahuila se mantienen atentos a la información sobre el paro en dicha armadora, para determinar alguna estrategia.

La huelga puede afectar al departamento de asientos de la planta Lear Ramos 1, debido a que toda su producción va a una planta que está en paro en Arlington, Texas.

A la fecha, los trabajadores no han sido notificados sobre la situación que guarda la planta en Ramos Arizpe, aunque el sindicato asegura que el riesgo latente de un paro forzado sería inevitable de no reactivarse las actividades en la planta del país vecino.

La huelga que afecta a 49 mil trabajadores de la armadora en Estados Unidos entró ayer en su segunda semana sin que se vislumbre solución a la disputa, aunque se reportaron avances en las negociaciones.

El director de Comercio y Turismo de Ramos Arizpe, Arnoldo Saucedo, aseguró que de parar las actividades en General Motors “los daños (económicos) serían demasiados”, por el tamaño de las plantas y la cantidad de empresas y trabajadores que dependen de la automotriz.

De acuerdo con cifras oficiales de la economía local, el 30 por ciento de las 250 empresas que se encuentran en los parques industriales de Ramos Arizpe está dedicado a la industria automotriz y serán de manera directa o indirecta afectadas por el paro forzado.