México.- La fuerza del Mercado Rosa surgió en Estados Unidos en los años 60, cuando empresas y vendedores comenzaron a buscar clientes “alternativos” o no heterosexuales, con buenas posibilidades de pago, por la oportunidad de gasto que les representaba la ausencia de hijos, de acuerdo con Bob Witeck, director ejecutivo de Witeck Communications del Financial Times.

Datos de LGBT Capital aseguran que en México, la economía rosa se integra por alrededor de nueve millones de personas que aportan más de 80 mil millones de dólares al PIB, en donde, para los adultos es importante la adquisición de bienes materiales como autos, propiedades y muebles, además de viajar, según Nielsen.

Así, empresas, gobierno y organismos cada vez generan más productos, servicios y proyectos que cubran las necesidades de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travesti e intersexual (LGBTTTI).

De acuerdo con el estudio El Consumidor LGBT Mexicano (2019), elaborado por Nielsen, esta población tiene una preferencia por los productos y servicios premium, además de buscar desarrollar actividades recreativas y culturales en zonas exclusivas.

El INEGI calcula que el 5 por ciento de la población se identifica como miembro de esta comunidad, significando poco más de cinco millones 600 mil personas, muchos son los avances que este grupo social ha logrado y actualmente al menos 10 estados se han declarado abiertamente gayfriendly.

Conforme la comunidad LGBTTIQ ha salido del “clóset” un mercado de alta rentabilidad y, en muchas ocasiones de alto poder adquisitivo, se ha despertado abarcando las más diversas ramas de la economía.

Muchos son los sectores que buscan hacer alianza con este mercado pues se calcula que este segmento gasta entre el 10 al 15 por ciento más que el llamado consumidor “buga” o heterosexual.

La derrama económica que dejan los consumidores homosexuales en todo el mundo se calcula en 700 mil millones de dólares anuales.

Por su parte, una encuesta realizada por la Asociación Internacional de Viajes LGBTQ reveló que el 66 por ciento de los consultados se "sentirían cómodos" de hacer viajes de ocio antes de que finalice 2020, con septiembre y octubre como los meses más elegidos.

"Estudios previos han demostrado que la comunidad es un segmento de viaje resistente y leal, con una tendencia a viajar más que sus contrapartes", afirmó John Tanzella, presidente de la asociación.

BTM.